El Servigroup Balonmano Benidorm se topa con la realidad en El Plantío

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Que el título de la División de Honor Plata y, con él, el ascenso directo a la Liga Asobal no se iba a ganar o a perder en la primera jornada es algo que todo el mundo tenía claro; pero si el Balonmano Servigroup Benidorm estaba esperando esta cita inaugural ante un rival como el UBU Burgos para hacerse finalmente a la idea de cómo va a ser este año en la categoría de plata del balonmano nacional, el golpe de realidad no podría haber sido mayor.

El equipo benidormense se vio claramente superado por el UBU Burgos en todo momento y en todas las facetas del juego para acabar volviendo a tierras alicantinas con una dolorosísima derrota por 31-19 de la que, más allá de la contundencia del marcador, poco hay que destacar.

El UBU Burgos, veteranísimo en estas lides, saltó a su cancha no sólo con la intención de gustarse y gustar a su público sino, sobre todo, mucho más convencido que su rival de querer marcar ese terreno que, al menos en las muchas tertulias previas al arranque liguero, señalaban a burgaleses y benidormenses como claros aspirantes a todo.

Arrollador en ataque, contundente en defensa y muy seguro en portería; el equipo local fue, durante toda la hora de juego, la némesis completa de un Balonmano Servigroup Benidorm que no funcionó ni en lo colectivo ni en lo individual. Ni en el ataque ni en la defensa. Ni en lo táctico ni en lo físico.

Lo visto en El Plantío, en definitiva, fue balonmano a dos velocidades cuya mayor y más cruel evidencia para los visitantes llegó en los 15 minutos finales de la primera mitad, donde un parcial de 9-1 sentenció el choque con el UBU Burgos marchándose a los vestuarios con una clara renta de 15-7.

La segunda mitad, con el Balonmano Servigroup Benidorm ya hundido en el marcador y en lo anímico, fue un monólogo local que sólo sirvió para terminar arrancando algunos ‘olés’ de la grada local y certificar ese 31-19 final con el que la expedición benidormense se tuvo que volver a casa.